Primeros auxilios para mascotas: cuáles son las acciones básicas para salvar vidas
El Colegio de Veterinarios de la Provincia de Buenos
Aires brinda una guía para actuar en los casos de emergencia más frecuentes
Al
igual que para las personas, los primeros auxilios para mascotas tienen la
finalidad de proporcionar un tratamiento de extrema urgencia en caso de que
sufran accidentes domésticos o ciertos imprevistos en la salud. El Colegio de
Veterinarios de la Provincia de Buenos Aires proporciona una guía de técnicas
básicas, que, si bien no reemplazan la atención veterinaria profesional, pueden
significar la diferencia entre la vida y la muerte de un perro o un
gato.
Mantener
la calma, no dejarse llevar por el miedo o la desesperación y actuar con
cautela, son las primeras recomendaciones para evitar que los animales heridos
reaccionen agresivamente; luego se detallan las instrucciones para los distintos
escenarios.
Accidentes
en la vía pública y en la casa: objetos clavados, cortes y mordidas
Si
la mascota sufrió alguna herida por causa de otro animal, algún corte o
lastimadura, se lo debe mantener en algún lugar seguro y tranquilo, lo más
cómodo y quieto posible. Se debe cubrir el área con una gasa esterilizada y/o
una toalla limpia y hacer presión en la zona afectada. Si la herida no es
sangrante, limpiar aplicando una solución salina esterilizada o agua limpia para
evitar infecciones. No utilizar alcohol en estos casos.
Por
último, si la mascota tiene algún objeto clavado en su cuerpo, no se debe
intentar extraerlo. Es fundamental esperar la presencia del médico
veterinario.
Foto:mascotasok.com
Atropellamiento:
dislocaciones o fracturas
En
este caso es necesario evaluar las características de los daños para no agravar
la situación. Lo primero que se debe lograr es inmovilizar al animal lo mejor
que se pueda. Las caídas o movimientos bruscos pueden provocar dislocación de
huesos o quebraduras, moverlo innecesariamente puede empeorar su condición.
En
caso de que haya sufrido la fractura de un hueso, tratar de reducir el
movimiento de la extremidad sin entablillarlo. Si sufrió una lastimadura en una
de sus patas, habrá que mantenerlo acostado y envolver el miembro dañado con una
toalla, de manera que tenga el menor movimiento posible, sobre todo si notamos
que el hueso sobresale de la piel.
Si
la mascota no presenta ninguna lesión visible, es imprescindible llevarlo a una
veterinaria para que lo revisen y asegurarse de que no tiene ningún daño interno
que pueda perjudicarlo más adelante.
Asfixia
o bloqueos respiratorios
Si
la mascota comienza a toser violentamente y muestra dificultades para respirar,
es posible que haya tragado un objeto que obstruye su garganta. Puede tratarse
de un bocado de comida, un juguete o cualquier otra cosa. La situación ideal es
que intervengan dos personas, una sosteniendo con firmeza al animal e
inmovilizándolo entre sus piernas mientras con las manos abre lo más posible su
boca (sin obstruir las fosas nasales), mientras la segunda persona trata de
localizar el objeto atorado y removerlo (en caso de que sea visible), ya sea con
sus dedos o usando unas pinzas de punta fina. Se debe tener sumo cuidado de no
enviar el objeto más adentro de la garganta. Además, en una situación así, los
animales tienden a morder. Si no es posible lograr que expulse el objeto,
llevarlo de inmediato a la veterinaria.
Envenenamientos
Si
existe la sospecha de que la mascota comió o tomó algo tóxico, se debe actuar
rápidamente ya que el tiempo es fundamental para tratar un envenenamiento. Se
debe llamar de inmediato al veterinario y estar preparado para dar los datos de
edad, peso y cualquier síntoma que presente el animal. En caso de ser posible,
conserve el recipiente que contiene el producto, alimento o muestra de la planta
que haya ingerido para ayudar en la identificación. No se le debe dar leche al
animal ante la sospecha de envenenamiento; este es un mito que se escucha
frecuentemente y tampoco se debe inducir al vómito de manera inmediata. Espere
las recomendaciones del veterinario.
fuente:
lanacion.com.ar